Consejos prácticos para viajar a Europa con más ganas que lucas Parte 1: el viaje en avión.

Por Carolina Adaros Boye | 2015-12-17 | 16:47

Hace poco alguien me dijo: “debes tener mucho dinero para viajar tanto” y no pude evitar recordar una frase que leí, que decía que viajar no es una cuestión de dinero sino de coraje. Algo debe tener de cierto considerando que yo nunca he tenido demasiado dinero. Según yo, tampoco es que haya viajado taaanto, pero si es algo que he priorizado sobre otro tipo de lujos. Entre otros destinos, he pasado en distintas ocasiones por quince países de Europa donde algo de experiencia he adquirido en lo que se refiere a ahorrar lucas viajando. La gente en general asume que no es posible ir, sin disponer al menos de un par de millones, y aunque sí, es verdad que sólo el pasaje puede salir un ojo de la cara, quiero compartirles ciertas ideas que sirven para evitar que el viaje les cueste además la mitad del otro ojo.

Lo que viene a continuación está basado en mi experiencia y la de algunos conocidos y probablemente será mucho más útil para personas solteras y sin hijos, pero espero que haya cosas que les puedan servir a todos por igual. Eso sí, viajar barato exige organizarse y planear uno mismo el viaje, investigar en internet y enterarse de ciertas cosas sobre los destinos y trayectos y sobre todo, muchas veces ciertas incomodidades como esperas en aeropuertos, usar el transporte público (que dependiendo de la ciudad y el horario puede estar bien o ser horrible), y considerar alternativas de alojamiento más sencillas que un hotel cinco estrellas. En general, la idea es priorizar la experiencia de estar en el lugar, conocer un poco la cultura local, disfrutar de los paisajes y vistas urbanas, probar comidas típicas y enterarse de todo aquello que hace ese lugar particular. No es que el resort “all inclusive” frente a una playa del Caribe tenga nada de malo, sólo que este artículo va dirigido a los que están dispuestos a ser un poco más aventureros y cuyas ganas de conocer nuevos lugares son más grandes que las dificultades que se puedan presentar.

Para empezar hablaré de los pasajes de aéreos, porque en la mayoría de los casos es lo que va a salir más caro, así que es lo primero que hay que mirar.

Primer tip: cotizar con tiempo los precios de pasajes

Les recomiendo la página web www.skyscanner.com que concentra los vuelos de todas las aerolíneas y combinaciones de vuelos para poder buscar la alternativa más conveniente. Es bueno empezar a mirar con tiempo para hacerse una idea de los precios y “afinar el ojo”. Mientras más anticipado compres es más barato, pero no es una regla absoluta. He visto pasajes determinados bajar, subir, volver a bajar y a subir en un periodo de tres meses. Por eso, más que comprar con anticipación yo diría que hay que cotizar y monitorear los precios con la mayor anticipación posible (de seis meses a un año más o menos). Un buen ejercicio es estar siempre mirando precios de pasajes a los destinos que a uno “le tincan” aunque no tenga fecha próxima para ir.

Consideren también que en general es más barato volar día de semana que fin de semana (siempre revisen y comparen los martes, miércoles y jueves) y fíjense que los precios consideren los impuestos. Es un error común no fijarse que muchas aerolíneas muestran el precio sin los impuestos y esto podría hacerlo parecer más barato al comparar con otras alternativas cuando no necesariamente lo es.

Segundo tip: véales el lado amable a los transbordos y esperas

Mientras escribo esto estoy en el aeropuerto de Guarulhos en Sao Paulo y me quedan como ocho horas para volar a Santiago. Horrible, considerando que ya llevo más de dieciocho horas viajando desde Alemania (salí de Colonia e hice transbordo en Múnich). Y es así en general, sobre todo para viajes transcontinentales que las alternativas más baratas tienen los peores horarios y/o varias escalas incluyendo largas esperas. Es eso o pagar más, uno elige. Y como yo elegí pagar menos le veo el lado amable y traigo libros, revistas, mi laptop, algunas bolsitas de frutos secos, un par de chocolates y lo más importante: mi almohada cervical inflable.

Tercer tip: hágase cargo de los trámites de viaje.

Entérense con tiempo del número de maletas con el máximo de Kilógramos por cada una. Esto varía según aerolínea y la ruta, así que no se confíen en lo que les dijo su amiga que viajó hace poco a Miami en LAN y revisen la información de acuerdo al destino y línea aérea. Si combinan más de una aerolínea y tienen distintos límites de equipaje es probable que deban guiarse por la que permita llevar menos equipaje. Antes de viajar realice por internet del proceso de facturación (Check-in) y asegúrese de llevar su tarjeta de embarque (boarding pass) impresa o lista para mostrarla desde el celular, ya que puede suceder que no logres conectarte a internet en el aeropuerto.

Cuarto tip: no pierda la navaja suiza que heredó de su abuelo por intentar llevarla en el equipaje de mano

Entérense con tiempo de lo que está y no permitido llevar en el equipaje de mano porque si lleva algo no permitido se lo van a quitar y punto, no hay apelaciones. Por favor (se lo ruego) no sea la señora que se pone a pelear en el chequeo de seguridad. No lleve tijeras, cuchillos, aerosoles ni descorchadores de botellas. Los medicamentos intente acompañarlos con receta médica. Están prohibidos los líquidos en contenedores de más de 100 ml, así que champús, cremas, colonias y perfumes deben ir en el equipaje que va en la zona de carga del avión y no con usted. Por otro lado, los líquidos de menos de 100 ml pónganlos en una bolsa sellable (tipo “ziploc”) de 1 Lt. Hay aeropuertos que son más estrictos que otros en esto, pero mejor no correr riesgos y no ser esa persona que “no sabía” y que se pone a insistir que no le quiten su perfume mientras todos los de atrás en la fila (yo por ejemplo) la están odiando. Si algo nos falta a los latinos es respetar el tiempo de los demás y acá “los demás” podrían perder como mínimo la paciencia y en el peor de los casos un vuelo mientras usted discute por una causa perdida.

Por último, recuerde revisar si necesita visa para el país de destino y cuál es el procedimiento para obtenerla. En ese sentido los chilenos somos bastante afortunados, podemos recorrer todo Latinoamérica y Europa sin visa hasta por 3 meses y ahora también eliminaron la solicitud de visa para EEUU y Canadá, pero tengo entendido que se debe hacer un trámite por internet antes de partir. Claro que si es un viajero experimentado seguro que debe saber todo esto y más, pero espero que esto sea útil para quienes no han viajado tanto o que han viajado siempre con alguien que se preocupa de estas cosas por ellos. Pronto les hablaré sobre buses, trenes, vuelos locales de bajo costo, el alojamiento, la comida y como moverse en la ciudad con más ganas que lucas, para que no sea el presupuesto el que les impida ampliar sus horizontes.

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