Jajaja, muy buena viñeta.
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La viñeta no tiene sentido. Si un espermatozoide no es gastado en vano, el cuerpo lo reabsorbe y desaparece igual; un feto, por su parte, solo puede convertirse en un ser humano. Me recordó a la vez en que un leso que tengo por amigo calificó al ser en gestación de "parásito", y le pregunté en qué situación quedaba él cuando tenía 25 años y todavía dependía de su mamá para vivir... ¿podría decidir ella abortarlo?
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hay tantas cosas ilógicas en este párrafo
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Hace mucho que no comento por acá pero me daré el tiempo de dejar mi comentario .... Hace tiempo que viene la pelea de donde comienza la vida, si desde el parto, si desde la fecundación, etc ... pero ya echar por la borda el tema ya me parece bastante ... si nos ponemos extremistas en las cosas terminaremos por encontrar todo malo, mi posición sobre la vida es clara, yo no apoyo el aborto y creo que la vida parte en la fecundación, ese es el inicio del milagro y debe respetarse como tal, se nota que como cultura no tenemos preocupación sobre la vida y que no somos capaz de afrontar nuestros actos y queremos la solución más rápida sobre lo que se nos avecina. Toda vida es un milagro entregado por Dios, si se nos encomienda semejante regalo debemos afrontarlo y prepararnos para ellos, ya que Dios siempre nos entregará las herramientas para salir adelante.
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wajajaja, aguante el pro-paja.
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Yo solo diré que cada quien es libre de hacer lo que se le de la gana con su cuerpo, si tuviera la opción, yo elegiría no abortar puesto me han enseñado de pequeño que toda vida es valiosa y me críe con una familia muy católica, sin embargo no por mis creencias se le debe quitar la decisión a otro ser humano que no las comparte.
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Un espermatozoide, al igual que el óvulo no son seres humanos. Son células de un ser vivo con la mitad de su material genético. Tienen el mismo valor que una célula de tu piel o de tu hígado. Tanto el óvulo como el espermatazoide están destinados a morir en 3 días si no hay fecundación.
El óvulo tiene la mitad del ADN de la mujer y el espermatazoide, la mitad del hombre. Cuando se logra la fecundación se juntan los materiales genéticos formando un ser humano distinto, y de dos células que estaban destinadas a morir por separado, juntas activan un proceso espectacular que desencadena la formación de otra vida humana, con la capacidad de durar mucho, pero mucho más de tiempo.
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