Desde el nacimiento de mi hijo, comenzó la carrera contra el tiempo para encontrar un nuevo hogar, más amplio y en un entorno más amigable que aquel en que resido actualmente, y a un precio razonable, cosa complicada, debido a cómo se han disparado los precios de viviendas en los últimos años.

El punto es que, curiosamente, los principales impedimentos para encontrar ese hogar soñado, han venido por parte de quienes están más interesados en que lo logre: los vendedores y corredores de propiedades. Información incompleta, fotos deficientes, dificultades de contacto y otros me han hecho descartar propiedades que, de otra forma, hubiesen estado en el tope de mis prioridades.

Por eso he querido señalar a quienes realizan estas publicaciones, algunos de sus errores más evidentes, a ver si mejoran un poco el ojo:

1. Poner poca información de la propiedad

Ingenuamente, algunas personas ofrecen poca información respecto a sus viviendas para "forzar" a las personas a contactarlos para solicitar más datos, oportunidad en que esperan "engancharlos" en la compra.

Sin embargo, considerando los cientos de propiedades que entran y salen a la venta cada día y la facilidad para compararlos en diversos portales de venta y arriendo de propieades, esta es una práctica altamente contraproducente. La mayoría de las personas, simplemente, tomarán el camino fácil y escogerán entre las alternativas que presenten más información y que calcen con sus gustos. Hay suficientes para pasar semanas visitando departamentos y casas, por lo que aquellas alternativas con menos información indefectiblemente quedarán para el final.

Muchos corredores y propietarios se conforman con señalar precio, ubicación, metros cuadrados (totales y útiles), número de habitaciones y baños, y si cuenta con bodega y estacionamiento (algunos ni siquiera cumplen con esto). Sin embargo, entre las decisiones de compra, especialmente en departamentos, se encuentra muy alto en la lista de prioridades: orientación, piso, existencia de balcones, logia o conexión para lavadora, ascensores y valor de gastos comunes.

Y si los 3 factores más importante en la venta de propiedades son "location, location, location" como dicen los gringos, una buena y atractiva descripción del barrio se hace fundamental: áreas verdes, metro, paraderos de bus y servicios como colegios, supermercados y otros no deberían omitirse. Tranquilidad y seguridad del barrio tampoco.

2. No poner fotos

Visitar propiedades es un proceso largo y engorroso: hay que coordinar la visita, despejar un horario, enfrentarse al tráfico y luego pasar un buen rato esperando a la corredora. Tanto esfuerzo, para encontrarse con una pocilga, ciertamente desmotivaría a cualquiera.

Por lo mismo, muy poca gente se aventura a visitar una propiedad cuya publicación no ofrece ninguna foto o sólo presenta fotos del exterior y alrededores de la propiedad. Es más, incita a la sospecha, pues en una era en que todo teléfono tiene cámara y subir las fotos es gratis en la mayoría de los sitios web, uno no puede sino sospechar que si no hay fotos, es que hay algo que no nos quieren mostrar.

3. Poner pésimas fotos

Un recorrido por los principales portales de venta de propiedades nos puede sorprender por el descriterio de algunas personas a la hora de proporcionar fotos de los lugares que venden. Algunas imágenes son tan perjudiciales, que uno llega a preguntarse si no están intentado espantar a los clientes en lugar de atraerlos. Entre los errores más comunes se encuentran:

- Fotos nocturnas o en días oscuros: La luminosidad y calidez de un departamento es un atributo clave para los clientes. Tomar fotos nocturnas o en días nublados, hace ver a las viviendas más frías y oscuras de lo que son.

- Habitaciones desordenadas o saturadas: Camas sin hacer, ropa por todos lados, muebles y objetos apilados por doquier, ollas y platos sucios, miles de cuadros y decoraciones... todo colabora a una impresión de caos, desorden y falta de espacio que atenta contra la sensación de espacio que pretendemos dar. Idealmente, las fotos de los espacios deberían mostrarlos lo más despejados posibles, aunque ojalá con algunos muebles de buen gusto que permitan determinar el tamaño del lugar. Muebles grandes y toscos deberían sacarse de las habitaciones, pues les hacen ver más pequeñas de lo que son. Lo mismo con aquellos que están en mal estado.

- Cortinas cerradas: Algunas personas, para que las fotos no salgan a contraluz, optan por cerrar las cortinas. Esta es una mala práctica por 3 motivos: primero, hace ver más encerradas y pequeñas las habitaciones, especialmente si la cortina tiene un estampado sobrecargado; segundo, las hace ver más oscuras de lo que son; y tercero, lleva a sospechar que se intenta ocultar una mala vista.

- Fotos desenfocadas o descoloridas: Si su teléfono no tiene una buena cámara, consiga una prestada, pero no suba fotos desenfocadas, descoloridas, pálidas, quemadas u oscuras. ¿Ha visto esos restoranes con fotos en que la comida aparece con colores extraterrestres, que le hacen perder el apetito? Ese mismo efecto tienen las malas fotos de un departamento.

- Fotos de detalles: Lo que uno busca determinar a través de las fotos de un departamento, es la espacialidad, luminosidad, distribución y estado de un departamento, además de su entorno. De poco sirven, entonces, fotos de marcos de ventana, esquinas de muros, puertas y otros detalles. Procure mostrar el máximo posible de las habitaciones, baños, cocina, pasillos, la vista, el entorno y, si es posible, el plano del inmueble, para hacerse una idea de la distribución.

- Omitir las áreas clave: Hay ciertas áreas de la casa o departamento que simplemente no pueden no mencionarse y fotografiarse, pues son fundamentales para tomar una decisión: la cocina, el baño, el living-comedor y el dormitorio principal. Al menos esos 4 espacios deben apreciarse con claridad. Además, si hay una buena vista, áreas comunes y jardines atractivos, inclúyalos.

4. Enterrar la información de contacto

Cuánto más expedito sea el contacto, más probable será la visita y subsecuente venta del departamento. Algunos vendedores, tal vez para evitar molestias, no incluyen sus datos de contacto y confían exclusivamente en el formulario del sitio web, lo que es bastante frustrante para el comprador, que no tiene claridad si el correo efectivamente llegó a destino o no, o cuándo lo responderán.

No puedo contar la cantidad de veces que he preferido un servicio o producto por sobre otro, simplemente porque me contestaron antes el correo o teléfono. No por tratarse de viviendas, esto va a ser menos cierto: la decisión de comprar o arrendar un lugar es tan complicada, que la gente busca cualquier razón para reducir su complejidad y eliminar algunas alternativas.

Uno debería al menos ofrecer una alternativa telefónica (para consultas urgentes) y un correo electrónico (para consultas más amplias o personas más tímidas), ojalá proporcionando un nombre de contacto. Además, debiese ser rápido en responder consultas y programar visitas lo antes posible.