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Imagen: Rodrigo Avilés
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Con una sola gota de sangre, este examen podría salvarte la vida

Dry Blood Spot es un sistema extremadamente simple y barato para detectar enfermedades que pueden causarnos la muerte. Una solución para la flojera de los sanos y también para millones de personas en países sin acceso a sistemas de salud.

Por Magdalena Araus @mmaraus | 2014-11-26 | 17:00
Tags | salud, enfermedad, examen médico, sangre, DBS, Jordi Martí, Ashoka
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¿Cuántas veces te has hecho un examen médico sin tener algún síntoma? Ir al doctor es algo que todos evitamos, ya sea por falta de tiempo o por la dolorosa cuenta asociada, así que a menos que algún dolor se vuelva insoportable, nos mantenemos lejos de esa sala de espera. Pero el relajo cuesta caro cuando una enfermedad silenciosa nos empieza a carcomer y amenaza con causarnos la muerte.

Eso dio vueltas en la cabeza del ingeniero químico español Jordi Martí hacerse exámenes es engorroso y caro. Y cuando se fue de vacaciones a África y tuvo que vacunar a su hijo, que lloró a más no poder y todavía arrastra el trauma, pensó en lo molestas que pueden ser para muchos las jeringas. Este hecho se juntó con una huella que le había quedado a los 19 años, cuando trabajó un año en el hospital militar de Barcelona en cuidados intensivos.

"Cuando estás un año viendo gente que lo pasa realmente mal, te das cuenta que si lo hubieras visto antes habrías cambiado muchas cosas. Si hubiese visto que estoy aquí, no habría fumado, habría hecho más ejercicio, habría hecho tal… me haría análisis de sangre más a menudo o habría hecho otras cosas ".

Por eso creó Dry Blood Spot Screening (DBS), un examen increíblemente sencillo, barato, rápido y poco invasivo que detecta enfermedades importantes y puede hacer la diferencia entre la vida o la muerte.

Al año, más de 7 millones de muertes están relacionadas con la presión arterial alta; 4,4 millones a altos niveles de colesterol; 2,6 millones se deben a la obesidad y 1 millón de personas muere por diabetes. Y cada día más 1.000 bebés nacen con VIH. Todo esto se podría prevenir con la información de DBS.

¿Qué esconde una pizca de sangre en un papel?

Un centro médico, un box con jeringas especiales, el catéter y envases para la sangre, una enfermera capacitada, cadena de frío para su traslado al laboratorio, etc. Todo ese aparataje requiere un examen de sangre tradicional y absolutamente nada de eso es necesario con este sistema: pinchar un poco el dedo índice, poner una gota de sangre sobre un papel, dejar que se seque y mandarla por correo a un laboratorio es la alternativa que ofrece DBS.

"La idea es que sea fácil… si es caro olvidamos al resto de la población", destaca Martí, indicando que cuesta hasta un 60% menos que el procedimiento común. DBS es democratización de la prevención.

Jordi reconoce que no descubrió la rueda, pero nos queda claro que la enganchó a un buen carro en 2011, junto al doctor cubano Juan Fidel Bencomo, que los apoyó para probarla en Río de Janeiro. La idea del examen de sangre seca fue del doctor Robert Guthrie en 1963 y se les hace hasta hoy a los recién nacidos para detectar la presencia de proteínas cerebrales fundamentales en caso de necesitar algún tratamiento inmediato. Esa fue la primera gran aplicación de este sistema.

"Lo que nosotros hicimos es: si la sangre se puede transportar, pues miremos para la población de grandes volúmenes, para hacer otro tipo de analíticas", comenta Jordi.

Si se seca la gota, la sangre se vuelve inofensiva en caso de que contuviera alguna enfermedad contagiosa. Después llega al laboratorio y ahí basta con tomar un muestra de 3 milímetros de diámetro, agregarle algún solvente específico para licuar la sangre y así se pueden detectar componentes que revelan índices o la presencia de alguna enfermedad. ¿Cuáles?

Niveles de glucosa, ácido úrico, colesterol, creatinina y hemoglobina, para detectar riesgos cardiovasculares, renales o de diabetes, por ejemplo. También enfermedades como SIDA, sífilis, toxoplasmosis y hepatitis pueden ser detectadas. Todo eso puede decir una gota de sangre seca y si el problema se descubre al comienzo, un par de recomendaciones sencillas en alimentación y ejercicio pueden cambiar el destino de una persona o, si la enfermedad se encuentra un poco más avanzada, algún medicamento.

Imagen: DBS- Screening.org

Eso sí, en cada pedazo se aplica un solvente diferente para observar un parámetro específico, por lo tanto si se quieren detectar muchas cosas, quizás sea mejor un par de gotas más.

El trámite para el paciente toma unos minutos, se rellena una ficha simple y se entrega la gotita de sangre y saber los resultados a través del mail toma entre unas dos horas o un par de días, dependiendo a fin de cuentas de la ubicación del laboratorio y la gestión.

Expandiéndose gota a gota

Jordi pensó esto primero para las personas en apariencia sanas en cualquier rincón del mundo y cómo llegar a ellas para salvarlas de las enfermedades que ni sospechan. Pero pronto esa idea hizo mucho sentido en países en vías de desarrollo y encontró su primer nicho en mujeres embarazadas que podrían transmitirle las enfermedades a sus hijos.

"Si tienes una enfermedad que no se puede prevenir, cuanto antes la sepas, mejor, porque vas a poder luchar contra ella. En el caso de las mujeres embarazadas, estudiamos enfermedades que se puedan prevenir de transmitirse al feto".

DBS está en nuestro continente: Brasil y Guatemala son lugares donde actualmente trabajan. Si una madre tiene SIDA o sífilis, por ejemplo, y esto se sabe tempranamente, el niño puede salvarse de contraer la enfermedad con un simple tratamiento. "Hoy no es un problema de medicamentos, los medicamentos sobran. Lo que no sabemos es a quién tenemos que dárselo. Si yo me dedico a la madre con anti retrovirales y hago que el virus en la sangre baje, el niño tiene un 98% de posibilidades de nacer sano", asegura el químico.

¿Y cómo sustentan todo?

Bien, el examen es barato de implementar y costo cero para el paciente. No gratis. El papel y la aguja son gastos despreciables, pero el laboratorio y los especialistas se deben pagar y por eso DBS busca alianzas con cualquiera que esté interesado: gobiernos, empresas, ONGs y personas comunes y corrientes que hagan pequeñas donaciones.

Actualmente y gracias a  Ashoka (Jordi es un fellow de esta gran red), los apoya el laboratorio Behringer Ingerheim con varios proyectos. Pero también con su campaña One drop to help to life ofrecen a quienes se hacen el examen, poder colaborar con algún proyecto, como una mujer embarazada en Guatemala, la purificación de agua en África, plantar en la Patagonia, etc. Así han recorrido diferentes países llevando stands con estos exámenes a eventos y universidades.

Hoy DBS es reconocido por la Organización Mundial de la Salud en su Compendio de Tecnologías Innovativas de la Salud para Bajos Recursos. Trabaja principalmente con mujeres embarazadas, pero quieren llevar la salud para que la gente participe en espacios de interacción social y así demostrar la simpleza de hacerse un examen y que la gente se contagie con la idea. Obviamente, también extenderlo a países en vías de desarrollo que apenas tienen acceso a exámenes médicos.

¿Qué falta para que esto se haga masivo?

"Primero buscar un tío bueno que lo lleve a cabo (bromea) y que no soy yo. Pero aparte de esto, es un boca a oreja, es muy fácil, la idea nuestra es tampoco poner ninguna barrera. Si quiero hacerlo yo en Chile, pues mañana lo hacemos. Cualquier universidad donde haya un voluntario… Si alguien quiere, pues se hace mañana. Es así de fácil. No necesitamos ningún tipo de estructura, lo hacemos con voluntarios de la propia universidad que nos ayuden a canalizar a sus amigos y tres o cuatro personas que nos ayuden a pinchar y ya está", responde Jordi optimista.

¿Conocías este tipo de exámenes? ¿Te parece una buena solución para la democratización de la salud?

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Comentarios
Roberto Morales Parra | 2014-11-26 | 19:47
1
pero igual hay que pincharse. ¡¡Odio las agujas!! mas que odio, es temor :(
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Magdalena Araus | Colaboradora | 2014-11-27 | 17:28
2
Hola Roberto! Si, es verdad, pero Jordi nos cuenta que es prácticamente indoloro porque es un pinchazo muy muy pequeño y superficial.
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Jordi Marti Gascon | 2014-11-28 | 11:26
5
Roberto, Soy Jordi Marti, te escribo desde Barcelona, España.
Todo el mundo tiene terror a las agujas.
Nuestro proyecto nació cuando tuve que acompañar a mi hijo de 6 años a ponerse una vacuna. En aquel momento me dije: nunca más.
Obtenemos una gota de sangre por una punción INDOLORA en un dedo. Para que tengas una idea, el pasado mes de Abril hicimos una campaña en una escuela, donde participaron niños de 10 a 17 años. Todos ellos con una sonrisa en la cara.
Para que tengas una idea, estas mismas lancetas (con la que realizamos la punción capilar), las llevamos a población indígena en la Selva Amazónica en Brasil. Con ellas no conseguíamos obtener una gota de sangre y la lanceta salía doblada porque la piel era más fuerte que el material de la lanceta.
Si quieres, mira este link y verás lo que hicimos en una Universidad en Madrid. Quién dijo que tomar una muestra de sangre dolía?
http://youtu.be/oKR7o9WkD0U
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Mack Vera | 2014-11-27 | 12:25
2
Ojalá se llevara a cabo.
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Magdalena Araus | Colaboradora | 2014-11-27 | 17:31
2
Ya se lleva a cabo en algunos lugares, ojalá se expanda más y debemos contarle a los interesados que puedan ayudar! Ahora están en proceso de alianza para llevarlo a más lugares de Latinoamérica. Saludos!
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