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Especial de San Valentín: películas alternativas de amor (y otras no tanto)

Este miércoles 14 de febrero se celebra otra edición del Día de los Enamorados, y el Chaya de Nerdix armó un listado con los no típicos films para calentar los motores y corazones. Desde casos bien freaks, animados hasta de ciencia ficción e independientes.

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Están los clásicos: Titanic, Diario de una Pasión, Realmente Amor, Mujer Bonita o Las 10 cosas que odio de ti. Pero también están las películas de esta lista, las que quizás se convertirán en clásicos algún día, pero hoy por hoy, son el plan B o el menú especial para los amantes diferentes.

Prepara los bombones, las flores o activa el Tinder, porque estas son 12 categorías con cintas del último tiempo, que te podrían servir.

En la Friendzone

Para los que están o han sufrido en ese cartel del “te quiero mucho, pero como amigo” o los pescan en privado y sin etiquetar en Facebook, buenas opciones son What If (2013) que tiene a nuestro querido Daniel “Harry Potter” Radcliffe enamorado de la cool Zoe Kasan, que lamentablemente está pololeando y lo tiene en su “nosequé”. Entretenida, livianita, ondera.

Y para los más treintones sería Drinking Buddies (2013), que nos cuenta cómo dos compañeros de pega (Olivia Wilde y Jake Johnson) empiezan a tener onda, mucha onda, pero ambos tienen sus respectivas relaciones. Dato interesante: todo transcurre en el mágico mundo e industria de las cervezas como hilo conector y seductor.

Maldita enfermedad

Películas de romances afectados por enfermedades (o que enferman) hay chorrocientas, sobre todo las adolescentes Bajo la misma Estrella o Antes de ti; así que por este vez nos jugaremos por dos comedias más adultas y que sacaron premios en su momento.

The Big Sick (2017), basada en hechos reales y escrita por uno de sus protagonistas, Kumail Nanjiani, con la historia de un humorista de stand up indio que además de lidiar con su familia y creencias debe apañar a su reciente novia que sufre un mortal virus. Inteligente, graciosa, contingente.

Agregamos al menú a El lado bueno de las cosas (2012), donde el depresivo y obsesivo Pat (Bradley Cooper), combate los fantasmas de una ex, los fármacos y ataques de pánico, al conocer a la igual de intensa Tiffany (Jennifer Lawrence), su profesora de baile. La Lawrence se llevó el Oscar a Mejor Actriz y tiene escenas encantadoras.

Verano (media) naranja

Febrero en Chilito es sol, playa y arena. Y estos dos títulos indagan estos gratos tiempos de vacaciones, partiendo con la próximamente a estrenar Call me by your name (2017) que debe ser sin lugar a dudas el film más romántico y sensorialmente bello del último tiempo. Sintiéndote parte de los campos italianos, sus días eternos, calmos y adentrándote en el secreto y sutil amor del adolescente Elio (Timothée Chalamet) y el diez años mayor, Oliver (Armie Hammer).

Sin exponer panfletos ni discursos, es una oda al amor diverso y tolerante. Como también no puede faltar 500 días de verano (2009) que como su nombre lo dice, entrega una real postal de una pareja, con sus tiempos y honestidades, como también un tremendo soundtrack.

Abrazos y balazos

Las parejas que son amantes de la acción, explosiones y peleas también merecen regalonear en su modo. Por eso la aclamada y melómana Baby Driver (2017) corre casi sola en estas lides.

Baby es un joven y experto conductor de robos de autos. El cual no puede dejar de su escuchar sus iPods, pues sufre de una enfermedad auditiva. Todo cambia cuando descubre a la bellísima Debora. Diversión pura que hace referencias a las cintas de autos y jóvenes rebeldes de los 60´s.

Otra que calza en esta categoría viste de rojo, es extremadamente sanguinaria y tiene al antihéroe más famoso y psicótico como cupido: Deadpool (2016) que irónicamente se autodenomina como una película romántica y fue estrenada en un Día de los Enamorados.

Otaku lovers

Es innegable que la cultura japonesa y el animé cada vez se toman las pantallas y carteleras locales. Con una fanaticada talibán, pero más que nada con productos notables que no se quedan en Hayao Miyazaki.

Dentro de este escenario, y cargado de amor, se lucen los nombres dos películas escritas y dirigidas por Makoto Shinkai; hablamos de Tu nombre (2016), donde además de conocer la cultura y tradición nipona, hay una historia de amor colegial que no sabe de tiempos y mapas. Un meteorito, dos chicos conectando sus mentes, preciosa.

Junto con esta, Cinco centímetros por segundo (2007), film que consta de tres episodios de la amistad y distancias entre Takaki y Akari, aquí las vueltas de la vida los separa más y más, pero los liga en su cariño. Ay.

Bailar pegados es bailar

Amar sin canciones no tiene brillo, ya sea perreando hasta el suelo o en un vals de casorio. Por eso las recientes La La Land (2016) y Sing Street (2016) entran como vinilo en cita romántica.

La primera exudando química y talento entre Emma Stone y Ryan Gosling (con un primer apronte en la también genial Loco y estúpido amor), homenajeando al género musical y al jazz. Emocionándonos y desgarrándonos el corazoncito en igual medida.

La segunda trasladándonos a la Irlanda de los 80´s, donde el pequeño galán de Conor no se le ocurre nada mejor que armar una banda de rock para conquistar a la inquietante Raphina. Una notable experiencia sonora que remite a los mejores hits oscuros y vaporosos de una década como también la realidad social y cultural del frío y olvidado Dublín.

Velada hipster

Las cintas de amores juveniles e indies son el corazón de este rollo, arman los espectadores y enamorados de las próximas generaciones. Bajo este tono, el eco millennial mezcla buenas historias, personajes, atmósferas y banda sonora es lo principal.

La invernal-británica Submarine (2010) tiene bien ganado su sitial: amor quinceañero, freak, inocentón y risible, además de las canciones acústicas de Alex Turner (Arctic Monkeys) decoran el despertar sexual de los simpáticos Oliver y Jordana.

Por los teenegers gringos estaría Adventureland (2009), que cuenta los juegos que pasan Em y James, dos chicos que trabajan en un parque de diversiones de un pueblo durante un verano en los 90´s, con Kristen Stewart y Jesse Eisenberg como los tórtolos de poleras celestes.

Amor por la ciencia ficción

Ya las historias de amor tienen lo suyo, pero cuando se le agrega algo tecnológico o fuera de lo normal, la cosa se pone mejor. Ejemplos de eso son Her (2013) o la animada Wall-E (2008), pero hay una que debe ser la reina y señora de todas: El eterno resplando de una mente sin recuerdos (2004).

Jim Carrey no comprende por qué la teñida y espontánea Kate Winslet lo borra de su memoria, y él decide hacer lo mismo. Una Joya.

Sumamos además la desconocida Safety No Guarantted (2012): un aviso en el diario solicita acompañante para viajar en el tiempo. Darius (Aubrey Plaza) encuentra que puede haber un reportaje gracioso detrás, y el atribulado y misterioso Keneth (Mark Duplass) la acepta en la utópica campaña. Mención honrosa para Buscando un amigo para el fin del mundo (2013) y su novela graciosa apocalíptica.

Romántica ñoñez

Los nerds también tenemos corazón. Y por lo mismo cobijamos nuestras propias películas representativas. Le ponemos fichas a la quintaesencia de los corazones gamers y comiqueros con Scott Pilgrim vs The World (2010) del gran Edgar Wright, con el icónico de Michael Cera como protagonista, que debe luchar contra los siete malvados ex de su enamorada: Ramona Flowers (Mary Elizabeth Winstead). Un manga y videojuego convertido en pololeo.

Ahora, si de amores monstruosos se trata, la premiada y aún en cines La Forma del Agua (2018), nos habla no sólo del cariño por el cine de clase B y las bestias de los 50´s, también entre la diversidad, la inclusión, que no importa de colores, razas, ni especies.

Solteros y/o despechados

Si este 14 de febrero te pilla sin acompañante o en el modo desamor, dos son las películas que desarrollan la idea del “amor propio” o del “no estoy solo, estoy conmigo”.

Una es Frances Ha (2012) con el día a día de Greta Gerwig (y dirigida por Noah Baumbach) en blanco y negro, en una excelente comedia independiente para conocerse y relajarse, gracias a una carismática mujer que adora la danza.

En el caso de las rupturas amorosas o los finales no tan felices (depende cómo se mire), aparecen Begin Again (2013) donde a través de la música vemos el renacer de una incipiente cantante folk (Keira Nightley) y un productor de la vieja escuela (Mark Ruffalo).

Cerramos con la melancólica pero también cómica Celeste and Jesse Forever (2012) que muestra la lucha entre dos mejores amigos-novios por seguir su amor ya sea juntos, o cada uno por su lado.

¿Qué otras películas agregarías a esta lista atípica?

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Comentarios
María José Salazar | 2018-02-11 | 17:01
3
Creo que UP! Es una de las películas más románticas que he visto... Si bien la historia de Carl y Ellie es secundaria al hilo principal, es hermosa! Lloro cada vez que Carl encuentra el diario de aventuras con las fotos de ellos dos
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Francisco Gonzalez | 2018-02-12 | 20:38
0
Que gran aporte para salir del romanticismo habitual del cine.... gracias!
Agregaría The Lobster, tal vez en una categoría intermedia entre despecho y ciencia ficción :)
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Toda la razón!! The Lobster es alucinante <3
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